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  • Emilio Piedras
Mientras al principio del gobierno municipal presumieron altas tecnologías para disminuir los delitos, ni siquiera hay luminarias en algunas de las calles

Han pasado casi dos años y medio desde que Anabell Ávalos Zempoalteca arribara a la presidencia municipal de Tlaxcala y contrario a lo prometido, la delincuencia continúan ganando terreno frente a la ciudadanía a pesar de que en su momento se presumió la incorporación de nuevas tecnologías para hacerle frente a las bandas delictivas que supuestamente no operan ni en la entidad ni en la capital del estado.

Mientras los drones del director de Seguridad Pública de la capital siguen guardados, algunas calles del centro de la ciudad no sólo no son atendidas, sino que incluso carecen de luminarias para realizar la labor preventiva en una ciudad en la que la percepción de la ciudadanía es que cada vez hay más inseguridad.

Diversas calles de la colonia Xicohténcatl se vuelven peligrosas cuando llega la noche y no hay alumbrado público, al igual que en la calle Miguel Hidalgo, Muñoz Camargo, Xicohténcatl, Mariano Sánchez, 1 de mayo entre otras más que carecen de este servicio que más allá de altas tecnologías requieren lo básico según los vecinos del municipio.

En colonias cercanas al centro del estado, los pobladores reportan también mayor incidencia delictiva como en Loma Bonita, La Joya y el Sabinal, mientras la policía municipal aseguran que esta coludida con la banda encargada de robar autopartes en Tlaxcala capital y los municipios aledaños.

Ante esta situación, vecinos exigieron a través de las redes sociales que el gobierno municipal y estatal mejoren las condiciones de seguridad en el municipio, incrementen el número de rondines en las zonas más peligrosas y doten de luminarias a las calles que lucen oscuras.

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