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El gris desempeño legislativo y el arribismo con el que llegó a ser diputado federal, no fueron considerados para la designación de Rubén Terán Águila como el primer nominado en la lista de candidatos a diputados locales por la vía de la representación popular, siendo premiado una vez más para seguir viviendo del erario público.
En el camino dejó a muchos morenistas de cepa y otros más que han sido luchadores del movimiento y ahora su cercanía con el líder nacional del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Mario Delgado Carrillo pone a Terán en la nómina del Congreso estatal para tres cómodos años más.
Esta situación, levantó puya entre los verdaderos morenistas que mientras daban la batalla manifestándose en contra de las reformas de Peña Nieto, tenían a un Terán siendo empleado del gobierno marianista.
La noticia cayó como balde de agua fría a aquellos que durante años han luchado al lado del movimiento del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), viendo que una vez más llega un priísta convenenciero disfrazado de morenista.
“A Terán ya se le olvidó que andaba de arrastrado con Mariano González y que mientras defendíamos a PEMEX, él estaba del lado de los que vendieron al país, hoy ocupa un lugar que no se merece y nuevamente lo premian con una posición para seguir viviendo de la ubre gubernamental “, dijeron molestos los morenistas.
Esto sumando a que existen versiones de que el diputado federal habría recibido dinero a cambio de algunas candidaturas a diputaciones locales y presidencias municipales, además de la exposición de audios que comprometerían al hoy candidato a la plurinominal de MORENA.