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El ex titular del Órgano de Operación Administrativa Desconcentrada en Tlaxcala del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), José Luis Aranza a poco de cumplir los dos años en el estado, dejó una administración deplorable en la que como siempre, quienes terminan pagando los platos rotos son los derechohabientes.
Circula información sobre el círculo cercano de trabajadoras ligadas a José Luis Aranza que han hecho del IMSS Tlaxcala su centro de operaciones para beneficios personales.
Tal es el caso de Karla María Oliva Mesa, Julieta Roldán León, Betzabé Nava Chavero y Yessenia Flores Flores quienes con chantajes, mentiras y el influyentismo del que presumen han ascendido en el escalafón ocupando puestos de relevancia sin hacer un trabajo de calidad que les respalde.
Karla María Oliva Mesa, encargada del despacho de la jefatura de personal ha llevado la relación con el sindicato al borde del colapso por los malos manejos y abusos que hace con el cargo. Señalan que de su anterior sede en Veracruz fue reasignada a Tlaxcala a pesar de tener una investigación pendiente por corrupción.
Presumiendo una relación sentimental con una importante figura del sistema central del IMSS se siente intocable y no duda en presumir una vida de lujos a la que sin duda, su salario no le permite acceder.
Cuenta con dos vehículos Audi con valor de más de un millón de pesos cada uno y recientemente adquirió una casa en una de las zonas más exclusivas de Puebla.
Por otra parte Julieta Roldán León, asesora del delegado que anteriormente ocupaba cargo de secretaria, pero ha puesto todos sus esfuerzos en mejorar su posición y la de su familia consiguiendo colocar a Lázaro González Amador, su esposo; Mariana Palma Roldán y Danitza Denise Roldán, sus sobrinas; Ulises González, esposo de su sobrino.
De su esposo Lázaro González Amador hay constancia de su ineptitud y nula experiencia para sostenerse en el cargo que ocupa pues reiteradamente en sus evaluaciones se le califica como No Apto, sin embargo no se ha hecho nada por retirarlo del mismo.
Es a través de Julieta Roldán que es posible entrevistarse con José Luis Aranza, de modo ella funciona como filtro permitiendo el acceso únicamente a quienes cree conveniente, siendo esta una falta a sus funciones y haciendo del cargo uso para su beneficio.
También se le señala de haberse robado el equipo de audio adquirido para la visita del entonces director general del IMSS a Tlaxcala, Mikel Arriola. Pues como responsable nunca lo inventarió y a la fecha el equipo esta desaparecido.