- Seguridad
Todo indica que desde una poderosa oficina de la actual administración, se han encargado de dar celeridad a las investigaciones de la muerte de Donají Morales Rico y desmentir lo que se vierte en las redes sociales en torno a un supuesto asesinato que según la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), se trató de un suicidio.
En una declaración la procuradora, Ernestina Carro Roldán salió a decir que ahora sí se pusieron a trabajar arduamente para concluir que, este caso se trató de un suicidio y así darle carpetazo al asunto que despertó la indignación de los colectivos feministas.
Fue a través de las redes sociales, que se sugirió que la hoy fallecida sufría violencia familiar por parte de su esposo, Delfino Chamorro Macías exfuncionario estatal y protegido de la Secretaría de Gobierno (Segob), por lo que el señalamiento fue que no se trató de una muerte natural.
Las acusaciones se dieron por parte de personas cercanas a la hoy fallecida y apuntaban directamente en contra de su esposo, algo que no ha sido demostrado pero que, las declaraciones de la PGJE, lejos de aclarar dudas ha levantado sospechas de que hicieron las investigaciones presurosamente y con una conclusión poco creíble.
De acuerdo con el protocolo de investigación ministerial, policial y pericial con perspectiva de género para el delito de feminicidio de la Fiscalía General de la República (FGR), el suicidio puede ser como resultado de la violencia de genero sufrida por la víctima, por lo que la investigación debe abarcar otros aspectos, lo que no ocurrió con la eficaz indagación de las autoridades tlaxcaltecas.
Esto sumado a la represión de grupos feministas al exhibir al secretario de Gobierno como acosador, ha provocado la tunda que las activistas e internautas en general ha puesto a las autoridades a quienes ven poco confiables e incluso encubridoras.
Esta violencia hacia la mujer es mal vista por la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros quien desde diferentes trincheras ha luchado en contra de este fenómeno, sin embargo, hay indicios de que colaboradores muy cercanos han sido acosadores e incluso versan sobre ellos acusaciones más fuertes, tal es el caso de Delfino Chamorro quien es señalado fuertemente de golpear a su esposa, situación que no ha sido comprobada.