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El papa emérito Benedicto XVI, quien falleció este sábado a los 95 años, reposa en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano ataviado con la casulla roja pontificia pero sin palio, en sus primeras imágenes difundidas este 1 de enero por la Santa Sede.
Joseph Ratzinger, Papa entre 2005 y 2013, cuando renunció voluntariamente a su ministerio, es velado privadamente en ese monasterio a la espera de que este lunes 2 de enero se abra su capilla ardiente en la basílica de San Pedro y el jueves tenga lugar su funeral.
Luego del anuncio de su muerte se desconocía qué protocolo se seguiría, pues el Papa alemán fue el único en renunciar en seis siglos de historia.
Las primeras imágenes de Benedicto XVI difundidas este domingo por la Santa Sede le muestran yacente en una sala del Monasterio, acostado sobre dos cojines, bajo un gran crucifijo y junto a un cirio encendido, un árbol de Navidad y un Portal de Belén. Viste los paramentos pontificales: la sotana blanca y la casulla roja, en sus manos tiene un rosario y sobre su cabeza la mitra. Sin embargo, en estas fotografías no lleva el palio, la estola de lana blanca con cruces negras símbolo litúrgico de jurisdicción. Su antecesor, Juan Pablo II, sí lo llevó en su capilla ardiente en 2005.
El palio, junto al llamado Anillo del Pescador, simboliza el poder pontificio y son recibidos en la misa de inicio del magisterio por los Papas tras su elección.
No se prevé que el cuerpo de Ratzinger sea llevado en procesión por la plaza de San Pedro, según indicó este domingo el portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni. Y el funeral será presidido por Francisco en la plaza de San Pedro y será solemne pero “sobrio” por expresa voluntad del fallecido.
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