- Seguridad
Al menos medio centenar de ministeriales fueron dados de baja el pasado fin de semana, entre comandantes, jefes operativos, de grupo y agentes, fueron echados a la calle sin aparente causas, ya que el argumento fue que no pasaron los exámenes de confianza, cuando en realidad los que no aprobaron son quienes se quedaron en la dependencia.
Varios de los despedidos, retaron públicamente a la procuradora Alicia Fragoso Sánchez, que sean exhibidos los resultados de los exámenes de control y confianza, ya que el personal que fue echado a la calle, fue quien aprobó las pruebas referidas y en contraste, los funcionarios que se quedaron laborando son los peores calificados.
Y es que los ex funcionarios públicos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) fueron notificados el pasado viernes por la mañana y a cambio les fue ofrecido un finiquito de poco más de 35 mil pesos a cada uno, sin tomar en consideración los años que se desempeñaron en la dependencia referida, ya que hubo quienes llevaban hasta 15 años laborando en la dependencia.
Lo anterior además de que provocó incertidumbre en los ex servidores públicos, lamentaron la arbitraria decisión, sobre todo porque en la recta final del año les será completamente difícil encontrar un trabajo.
En ese sentido, lamentaron la insensibilidad de la Procuradora Alicia Fragoso, por haberlos lanzado a la calle en momentos críticos para obtener un nuevo empleo, a pesar de que la mayoría son jefes de familia y son quienes llevan el sustento en sus hogares; “a la procuradora fue lo que menos le importó”.
Incluso, algunos de los despedidos amagaron con proceder con sus respectivas denuncias laborales debido a que fueron pisoteados sus derechos como trabajadores y servidores públicos.
Con el despido referido, se suma a las acciones del Gobierno del Estado que ha despedido a cientos de trabajadores bajo el pretexto de aligerar la carga burocrática, sin embargo, esa medida ha servido principalmente para quitarse compromisos políticos.