• Educación
  • Roberto Nava Briones
Ante la ola delictiva que se vive en Tlaxcala, temen docentes que la información privada pueda ser usada para otros fines.

Con la aparente finalidad de conocer a detalle en que gastan sus salarios los miles de docentes en el Estado, la Secretaría de Educación Pública en el Estado (SEPE) y la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET) exigió a los maestros de diferentes subsistemas presenten sus estados de cuenta bancarios sobre los pagos que perciben.

La medida obligatoria provocó malestar entre los trabajadores de la educación, ya que no está justificada debido a que no existe algún apartado en la Ley, que obligue al trabajador en presentar a detalle en que gastan sus salarios.

Y es que además de que el trámite fue impuesto por el secretario de Educación Pública, el costo les será cargado a los docentes ya que por la emisión de cada estado de cuenta el Banco correspondiente cobrará promedio 45 pesos.

Algunos de los denunciantes manifestaron su molestia y dijeron estar temerosos de que esa información pueda ser usada para otros fines ya que ante el clima de inseguridad que se vive en el Estado, la misma podría poner en riesgo su integridad.

Por lo anterior, algunos de los inconformes adelantaron que habrán de recurrir a la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Tlaxcala (CEDH) para exigir a la dependencia estatal frene ese atropello ya que es un acto violatorio a su privacidad.

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