• Educación
  • Gerardo Santillán
Alcanza casi al 40 por ciento de los 18 mil 300 docentes que pertenecen a ese gremio, reconoce Corona Pérez.

Más de siete mil de los 18 mil 300 docentes del Sindicato de Trabajadores de la Educación (SNTE) en Tlaxcala, no han recibido sus dictámenes de basificación por diversas omisiones personales, sindicales o administrativas de la autoridad, lo que representa un rezago de casi el 40 por ciento en ese proceso.

Así lo admitió el secretario general de la sección 31 del SNTE, J. Carmen Corona Pérez, quien reveló que hay profesores que han trabajado por 25 o 30 años y que recién han recibido la base de su clave de servicio.

Por ello, calificó como “un acto de justicia” la entrega de mil 241 dictámenes de basificación y 110 de escalafón, en una ceremonia que tuvo lugar este lunes en la sede alterna del gremio en la avenida Juárez de la ciudad de Tlaxcala.

Aunque la ausencia del dictamen no pone en riesgo laboral o económico a los maestros, sí es un procedimiento que les garantiza máxima certidumbre en el desempeño de sus funciones.

“Hay rezago en esto, pero estamos a tiempo porque hemos sido cuidadosos de entregarlos cada año regularmente y eso limita la inseguridad que pudieran tener alguno de los compañeros en cuestión de que no tenga dictamen”, dijo en entrevista posterior.

“La basificación la tendremos que ajustar de acuerdo a la Ley (…), vamos a seguir con esta parte haciendo valer este recursos y obviamente va a ser permanente de aquí hasta que el último trabajador tenga su código de base. Todavía tenemos poco más de siete mil trámites por realizar”, añadió.

Sostuvo que no todo este retraso ha sido responsabilidad del sindicato, sino también por omisiones de las autoridades educativas que de manera negligente han retardado muchos de los nombramientos pese a que el trámite por seis meses y un día se ha hecho correctamente.

Por otra parte, Corona Pérez indicó que como parte de la Reforma Educativa en la parte de la evaluación, tampoco está en riesgo la permanencia de los profesores en sus labores ni en sus percepciones, pero será hasta que pasen 18 meses de la entrada en vigor de esas leyes cuando se visualicen los resultados.

El líder de la sección 31 del SNTE explicó que si los docentes en servicio no aprueben una tercera evaluación van a ser promovidos a otra área, pero hay que revisar sobre si se van con el mismo sueldo o se ajusta a un plan de retiro voluntario “que tampoco sabemos cómo va a ser”.

Sin embargo, afirmó que si por parte de las autoridades no existe una inversión adecuada para la formación del alumno en infraestructura, equipamiento y material didáctico, así como para otorgarle a los maestros las herramientas pedagógicas adecuadas para prepararse, “difícilmente va a prosperar una reforma y solo quedará en discurso, porque van a ser evaluados cuatro factores incluidas las políticas públicas”.

 

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