- Seguridad
El probable responsable ejecutó a padre e hijo, ya que le debían 20 mil pesos por la venta de dos becerros.
En una acción más del Gobierno del Estado para abatir la impunidad, y gracias al trabajo de investigación que ejecutó el personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se logró esclarecer el doble homicidio perpetrado en marzo de este año en el municipio de Tenancingo.
Con la aprehensión de César Jiménez Guzmán, de 26 años de edad, se logró conocer que asesinó a padre e hijo por disparos de arma de fuego, ya que se negaron a pagar dos becerros que les vendió.
Esta acción fue posible gracias al trabajo que implementó la Policía Ministerial del Estado, a fin de esclarecer la muerte de quienes respondieron a los nombres de Florencio Cruz Techalotzi Morales, que al morir contaban con 43 años de edad y Edgar Techalotzi Iturbide, de 21, padre e hijo respectivamente, que fueron privados de la vida por disparos de arma de fuego en el municipio de Tenancingo, en marzo del año en curso.
Por ello, los agentes investigadores se abocaron a realizar las pesquisas correspondientes a fin de dar con el paradero de el o los probables responsables; de esta manera, tuvieron conocimiento que un sujeto que responde al nombre de César Jiménez Guzmán podría estar relacionado en el homicidio.
Luego de las indagatorias descubrieron que después de que cometió el ilícito, el probable responsable se alojó en un domicilio de la colonia La Loma Xicohténcatl, en la capital de la entidad por tiempo indefinido con la intención de evadir a la justicia.
No obstante, los detectives mantuvieron un monitoreo constante del sospechoso; fue así, que tuvieron conocimiento que regresó al municipio de Tenancingo, por ello, a las 18:45 horas del 19 de septiembre acudieron a las inmediaciones de esa demarcación, donde una persona del sexo femenino señaló sin temor a equivocarse a un sujeto que circulaba a bordo de una bicicleta como el probable responsable.
Ante el señalamiento, los detectives se aproximaron al sospechoso y le informaron la situación que prevalecía en su contra; por lo que lo exhortaron a acudir a la dependencia a rendir su declaración en relación a los hechos.
Durante su declaración, Jiménez Guzmán reconoció haber asesinado a los individuos, agregó, que le vendió a quien en vida respondió al nombre de Florencio Cruz Techalotzi Morales, dos becerros por la cantidad de 20 mil pesos; sin embargo, sólo le abonó dos mil.
Relató que lo buscó varias ocasiones para que finiquitara el acuerdo; sin embargo, el hoy occiso lo evadía y se negaba a pagarle. De esta manera, el 19 de marzo del año en curso, lo encontró sobre la avenida Ayuntamiento, en el municipio de Tenancingo, a bordo de su camioneta particular y en compañía de su hijo, por lo que decidió enfrentarlo y cobrarle.
No obstante, el hoy extinto se negó nuevamente a liquidar su deuda, por lo que Jiménez Guzmán sacó de entre sus ropas un arma de fuego y la detonó en repetidas ocasiones en contra de ambos individuos y huyó del lugar.
Con la confesión, el Representante Social documentó las pruebas contundentes y realizó las diligencias correspondientes para que el inculpado fuera consignado y trasladado al Centro de Reinserción Social (Cereso), a fin de que el Juez de la causa determine su situación jurídica.