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Después de que se evidenciara la mafia la interior del Congreso del Estado para repartirse 22 plazas sindicalizadas entre los legisladores de las fracciones del PRI, PAN, PRD, PT, PS, PVEM, PAC y Movimiento Ciudadano, la anterior presidenta del Comité de Administración del Legislativo, Eréndira Jiménez Montiel evitó hablar sobre el tema tratando de evadir la poca transparencia con la que se condujeron los legisladores para beneficiar a sus “escuderos”.
La perredista como Poncio Pilatos “se lavó las manos” y mencionó que le corresponde al actual presidente de esta Comisión, dar conocer los pormenores de esta negociación en la que se buscó beneficiar a los más allegados a los diputados para concederles una plaza con cargo al erario público, siendo los principales orquestadores quienes integran éste Comité como el caso de Julio César Álvarez García, Bladimir Zainos, Albino Mendieta Lira, Baldemar Cortés, Silvano Garay, Patricia Zenteno y Evangelina Paredes además de la propia ex presienta.
Incluso la legisladora dijo “que no hay algo de lo que pueda avergonzarme, no hay nada malo”, por lo que Jiménez Montiel no negó las imputaciones pero tampoco acepto que se haya dado la vendimia de esta manera y que ahora es Javier Vázquez Sánchez quien debe de dar a conocer los pormenores al ser el presidente del Comité de Administración.
Las plazas entregadas a los cercanos a los diputados no fueron transparentadas y sólo se habría dado en una negociación en donde hasta los mismos enemigos políticos aceptarían participar de estas atribuciones que se auto otorgaron, vulnerando la confianza de la ciudadanía más aún los diputados foráneos.
Pese a esto Jiménez Montiel se comprometió a que sostendrá una reunión con los medios de comunicación para hablar del tema y evitar especulaciones en relación a la entrega de plazas a allegados de diputados, siendo ella la primera responsable al haber sido titular del Comité de Administración en el ejercicio 2014.