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Por ser acusaciones sin fundamento y sin razón, la Diócesis de Tlaxcala no va a relevar al párroco René Hernández Juárez de Ayometla como lo demandan un grupo de feligreses que no concuerdan con sus formas.
Así lo advirtió el obispo Francisco Moreno Barrón, quien incluso aseveró que los inconformes con la elección de los fiscales ni siquiera participan en la vida pastoral de su parroquía y no representan a la comunidad.
En ese sentido, los fieles pueden ir a otros templos si así lo desean para ya no enrredar más las cosas en Ayometla, pues pretenden mezclar asuntos de otra índole a los estrictamente eclesiásticos.
En una rueda de prensa a través de un comunicado, dejó en claro que el Código de Derecho Canónico y la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, faculta al obispo ser la autoridad para resolver conflictos internos de su territorio, pero además la Diócesis debe coadyuvar con las autoridades de los tres niveles de Gobierno para mantener la paz social.
A preguntas expresas, Moreno Barrón afirmó que el párroco de Ayometla "no se está enriqueciendo" pues solo administra recursos de donaciones, y que los costos de los servicios que proporciona la iglesia no son altos, por ejemplo, oficiar misa para un matrimonio son 250 pesos.
En suma, reiteró que la Diócesis no cederá a presiones ni chantajes, por lo cual no habrá cambios en la parroquia de Ayometla.