• Salud
  • Roberto Nava Briones
No existe regulación de las autoridades en los servicios médicos que se prestan en clínicas particulares.

Además de lucrar con la salud, pseudo médicos se hacen pasar como tal en aparente contubernio con personal administrativo del Hospital particular Cedros ubicado en la capital del Estado, con pacientes involucrados en accidentes viales ya que les imputan cobros dobles por los servicios prestados y no cuentan con una lista de costos en la prestación de los servicios.

Fue el pasado viernes, cuando se suscitó el vergonzoso hecho en el que evidenció la aparente corrupción que priva en el nosocomio referido, después de que una menor de nombre Karla “N” fue atendida en el mismo, luego de haber sido atropellada cerca de conocido centro comercial de la capital.

De acuerdo con versiones de los familiares de la menor estudiante de secundaria, dentro de los acuerdos con el conductor responsable del accidente, éste se hizo cargo de pagar todos los gastos médicos que generó el percance para que la familia desistiera de la denuncia y le otorgara el perdón.

En consecuencia, los involucrados firmaron un acuerdo, por lo que acudieron al hospital para que se liquidara la prestación del servicio médico.

Sin embargo, mañosamente personal administrativo de ese hospital intentó realizar cobro doble a los familiares de la menor, pues personal de ese centro hospitalario se aventó la bolita para obtener doble pago bajo la justificación de que no se había liquidado el servicio, no obstante de que minutos antes se había pagado ya los servicios.

Lo anterior, provocó que los familiares de la afectada se negaran en pagar el importe de un servicio que con anticipación había sido cubierto.

A este reportero presenció cuando personal del hospital intentó retener a la menor en contra de su voluntad, por lo que sus familiares no descartaron proceder en consecuencia ya que “Karla N” tuvo que ser trasladada a otro hospital para su valoración tras el impacto recibido y que ameritó quedar internada.

Derivado de lo anterior y al no lograr obtener el pago doble, al lugar acudió un sujeto que se dijo ser “doctor” quien de forma altanera, grosera y carente de ética, proliferó; “pinches jodidos sino tienen dinero para que vienen aquí”.

Cuando este comunicador intentó entrevistarlo, en una primera instancia dijo que los usuarios del servicio médico se negaban a pagar un servicio prestado, a pesar de las agravantes arriba expuestas.

No obstante, segundos después su actitud fue violenta en sus declaraciones ya que fuera de sus cabales arremetió en contra de este comunicador; “bueno y a ti quien te llamó, tu quien eres, no puedes entrevistarme…los señores quieren irse sin pagar”.

¿Usted es doctor trabaja aquí?, se le preguntó; “y eso a ti que te importa”, se trata de una irregularidad en la prestación de un servicio al público doctor, se le inquirió; “eso no es de tu incumbencia…yo soy doctor y te vale madre lo que pase aquí”.

Al no justificar ser un profesional de la medicina y evidentemente molesto por no lograr obtener el doble pago, optó por amenazar a los ahí reunidos; “tómenles fotos y grábenlos”, ordenó al personal ahí reunido.

Previo, se pudo corroborar que en el nosocomio referido no existe una lista de precios por los servicios que ofrece, razón por la cual los familiares de la menor accidentada, adelantaron que habrán de proceder además ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para que regule la operación de esos centros que se dedican a extorsionar a la ciudadanía bajo la justificación de la prestación de un servicio médico.

Incluso, no se descartó que el Centro Hospitalario Cedros trabaje fuera de la Ley ya que no son exhibidos sus permisos que otorga la Secretaría de Salud (Sesa) a través de la Coeprist, así como el que otorga el municipio de Tlaxcala para su operación.
 

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