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Tras no lograr ni la candidatura al gobierno del estado ni a la presidencia municipal de Apizaco por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), la exdiputada federal Guadalupe Sánchez Santiago optó por sumarse a la campaña de la senadora con licencia del Partido Acción Nacional (PAN), Adriana Dávila Fernández a quien el día de ayer levantó la mano y el “Bullying” en las redes sociales no se hizo esperar.
La hija del emblemático exgobernador Emilio Sánchez Piedras, dejó así su militancia priísta para unirse a la candidata del PAN al gobierno del estado, lo que despertó las críticas entre sus seguidores y panistas que no ven como un acierto la suma de Sánchez Santiago al proyecto de Adriana Dávila.
Guadalupe Sánchez además de ser la hija de un exgobernador, fue cuñada del actual mandatario estatal, Mariano González Zarur, por lo que han crecido las sospechas sobre un pacto entre el actual titular del ejecutivo y Adriana Dávila, tal y como lo refieren algunos perfiles en las redes sociales.
La ahora panista fue señalada de ser una política que sólo busca el poder y de tener ambiciones personales, Eva Marina Cordero Soto dijo “definitivamente nunca tendrá el mismo carácter que su padre y con esto se comprueba que sólo piensa en sus intereses personales, cual trabajo nada si su padre viviera ya la hubiera puesto en su lugar por los que creen en ella aguas”.
Antonio Pedroza comentó “desconozco las negociaciones que hayas tenido con la Dávila, pero creo que tu berrinche de no apoyarte el PRI en la candidatura por la presidencia municipal de Apizaco, cabo la tumba de tu carrera política, lastima del prestigio que te dio ser hija de un grande de la política tlaxcalteca, pero me causa mucha admiración tu decisión, ya que sabemos que esta señora es senadora por la vía pluri y designada por los Ortiz, pero creo que hubiese sido mejor opción Lorena, ……. Otra Minerva”.
De forma general le dijeron “chapulina”, traidora y de ser una persona que sólo está buscando el interés personal al haber abandonado al partido por el cual su papá Emilio Sánchez Piedras llegó a ser gobernador del estado, el mismo instituto político por el cual pudo tener una curul en el Congreso federal y que dejó presuntamente por no haber logrado la candidatura al gobierno del estado y a la alcaldía de Apizaco.