- Mazatecochco
Han transcurrido 13 días desde el robo de una camioneta propiedad del Ayuntamiento de Mazatecochco, y apenas ahora, con evidente retraso y condescendencia, el gobierno municipal emite un comunicado que, lejos de esclarecer, genera más dudas e indignación.
El alcalde Emilio González Cortés parece más interesado en “curarse en salud” que en asumir con responsabilidad y transparencia un hecho tan delicado como lo es el despojo de un bien público y la privación de la libertad de un servidor municipal.
El comunicado, tibio y plagado de omisiones, no precisa el lugar, la hora, ni las circunstancias del robo.
No menciona responsables, ni da certeza sobre los avances de la investigación. Esta falta de claridad no solo es preocupante, sino también insultante para una ciudadanía que exige rendición de cuentas y respuestas inmediatas.
El edil tuvo que esperar casi dos semanas para dar a conocer este hecho, sin que antes brindará información detallada desde el primer momento en que ocurrió el hecho y lo peor escondió el tema.
Resulta ofensivo que el alcalde hable de “respetar los debidos procesos” cuando la opacidad ha sido la constante en su administración.
En lugar de fortalecer la confianza ciudadana, este comunicado refleja la torpeza, la improvisación y el desdén con el que se maneja la seguridad y el patrimonio público en Mazatecochco.
La ciudadanía merece saber la verdad. No se trata de justificar con tecnicismos la inacción, sino de asumir responsabilidades, de cara y con valor, ante quienes confiaron en él para gobernar.
Para Emilio González Cortés cada error, cada omisión, es una piedra más en la ya deteriorada credibilidad de su gestión.