Es pertinente recordar que Eloy Reyes vendió al menos 14 plazas laborales a familiares y amigos para tener los beneficios que otorga el Sindicato 7 de Mayo.
Mientras el discurso oficial habla de “reforzar la seguridad”, los hechos demuestran que el municipio se ha vuelto un blanco fácil para los ladrones, y la confianza ciudadana en la autoridad local sigue en caída libre.