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La empresa química Clorobencenos que opera en el municipio de Tequexquitla, Tlaxcala, reportó pérdidas por dos millones de pesos y el riesgo de suspender actividades como consecuencia de las protestas que iniciaron pobladores de esa demarcación para exigir el cierre o traslado de la factoría.
Y es que, el pasado 7 de agosto, habitantes de la comunidad de Mazapa, donde se localiza la planta, cavaron una zanja con la que bloquearon los accesos para impedir que unidades de carga ingresaran a la fábrica que procesa el químico clorobenceno.
Los quejosos atribuyen contaminación, daños a la salud e incluso malformaciones en recién nacidos, a la empresa que procesa químicos para la fabricación de productos de limpieza y cosméticos.
Tomas Galicia Gutiérrez, gerente operativo de la empresa Clorobencenos, informó que aparte de bloquear los accesos a la industria, el pasado sábado, los vecinos de la localidad pararon un tren que trasladaba 160 toneladas de cloro de materia prima.
Para evitar un conflicto mayor, los carros tanque tuvieron que retornar con la carga, lo que impactó negativamente en la producción de la planta.
Galicia Gutiérrez subrayó que, hasta este día, la empresa Clorobencenos reporta pérdidas por dos millones de pesos, porque no ha podido trabajar al ritmo previsto por el bloqueo que mantienen los quejosos.
El gerente advirtió que, de continuar esta situación, en un plazo de 15 días la factoría tendrá que apagar sus reactores y suspender actividades, situación que también afectará a los trabajadores porque se quedarán sin empleo.
"No hemos podido surtir... El sábado nos llegaron dos cargas de cloro, pero inconformes atravesaron una camioneta para que no pasara la locomotora, así que los carro tanques prefirieron regresar para no causar un conflicto", apuntó.
Galicia Gutiérrez acentuó que, por el conflicto con los pobladores, la empresa está en riesgo de no cumplir con 15 pedidos que tiene pendientes, 13 para México y 2 para Estados Unidos.
El gerente manifestó que ha solicitado el apoyo del Gobierno local para mediar el conflicto; sin embargo, no ha recibido respuesta.
Desde el año 2011, inició en Mazapa, comunidad de Tequexquitla, un movimiento social en contra de la operación de la factoría Clorobencenos. En ese año, se registró una explosión en la que una persona perdió la vida y centenares de familias tuvieron que abandonar sus viviendas.
Los lugareños aseguran que la empresa contamina la zona, causa daños a los cultivos y a la salud de las familias, por lo que exigen el cierre o traslado de la planta.