- Tlaxcala
Entre el 18 de diciembre y el 6 de enero se desarrolla el operativo turístico y vacacional a cargo de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), dentro del cual se vigila el comportamiento de los prestadores de productos y servicios para evitar abusos a las personas.
De acuerdo con la delegación de la Profeco, en esta época del año incrementa de manera importante la actividad comercial y es necesario verificar que no haya incrementos injustificados de precios en productos de primera necesidad y de los demás que son para regalar.
Lo que promueve la dependencia federal es el consumo responsable y a través de pláticas con organizaciones ciudadanas y grupos se les hacen saber las obligaciones de los proveedores para que éstos no cometan irregularidades.
Aun con ello, el costo de los juguetes y artículos navideños literalmente se ha ido a las nubes sobre todo en tianguis temporales de los municipios más grandes como Tlaxcala, Apizaco, Chiautempa, Zacatelco, entre otros, sin que los inspectores de la Profeco tengan algún tipo de influencia para que los mercaderes no abusen.
Y es que a pesar de que la normatividad marca que los precios de los productos deben estar a la vista, eso no es así y conforme se han acercado las fechas importantes, sus precios suben aun más sin control.
La Profeco vigila establecimientos como hoteles, bares, restaurantes, líneas de autobuses, lavanderías, tiendas de autoservicio y departamentales, de conveniencia, entre otros, pero parece que poco puede hacer ante el comercio temporal y semifijos, que es donde se cometen los mayores abusos.