- Tlaxcala
En relación a la detención de 7 elementos de la Policía Estatal Acreditable (PEA), la procuradora, Alicia Fragoso Sánchez dio a conocer que estos ex policías podrían alcanzar hasta 40 años de prisión, mientras que el Comisionado de Seguridad Pública, Orlando May Zaragoza continúa en su cargo a pesar de ser el responsable de los exámenes de control y confianza, además de las sospechas que crecen en torno a su participación en los ilícitos que realizaba su mano derecha José Jorge López “El lobo”.
Al ser cuestionada la procuradora no quiso dar a conocer si existe una línea de investigación que involucre a más policías secuestradores, esto a pesar de las sospechas de que el mismo May Zaragoza estaría implicado y sería el jefe de la banda según versiones de policías estatales que fueron entrevistados por este medio.
El titular de seguridad en el estado sólo cumplió con una orden de presentación pero hasta el momento ostenta el cargo, siendo él quien trajo a los principales sujetos que fueron detenidos y consignados, inocentemente la procuradora dijo desconocer los antecedentes del “lobo” y apuntó que no puede decir si hay fallas o no en los exámenes de control y confianza puesto que ella no los aplicó, dejando entrever nuevamente la presunta complicidad de May Zaragoza.
Fragoso Sánchez inclusive presumió su rapidez para la investigación a diferencia de otros estados, eficiencia por la que la abogada de Tlaxcala podría ser llamada para atender el caso de los desaparecidos de Ayotzinapa, mientras que May Zaragoza continua al frente de la policía estatal a pesar de las sospechas, críticas y una presunta impunidad que dice la procuradora en Tlaxcala no existe.
Por su parte, Ernesto Ordoñez –Napoleón- dijo que los exámenes de control de confianza son una herramienta valiosa pero no infalible y confirmó que May Zaragoza, quien es el responsable de traer a Tlaxcala al “lobo” sigue al frente de la policía estatal como si nada hubiera pasado, a pesar de que dicen que no hay impunidad y que les gusta barrer la casa según palabras de la procuradora.
Lo cierto es que la desconfianza de los tlaxcaltecas hacia los policías estatales es evidente y el “coordinador de los esfuerzos” se niega a dar la cara al molesto “tejido social roto”, a través de la procuradora quiere evidenciar que hay respuesta a este tipo de problemas que nunca debieron haberse suscitado de tener un eficiente equipo que investigue los antecedentes de los funcionarios y una correcta aplicación de los exámenes de control y confianza.
Tal vez las autoridades estatales estén a la espera de que se susciten más secuestros, extorsiones o robos por parte de los policías que seguirían órdenes superiores, casi obligados a llevar una cuota a sus jefes para tener la certeza de que hay más gente implicada en la banda de secuestradores que llegó a Tlaxcala en este sexenio.