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La PGJE recurrió a diferentes métodos para sacar confesión a Juan Carlos Yáñez Osorio.

Un peritaje solicitado por un Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos arrojó que la policía de investigación de Tlaxcala recurrió a diferentes tipos de tortura para inculpar por secuestro exprés al ex delegado de la policía estatal en Apizaco, Juan Carlos Yáñez Osorio.

El portal Aristegui Noticias narra que el ex mando policía sufrió diversas vejaciones como toques eléctricos, golpes, cortadas en las muñecas y métodos de asfixia para sacar la confesión que lo inculpara en uno de los casos más sonados en los últimos años en el estado por estar involucrados altos funcionarios de Seguridad Pública, entre ellos José Jorge López, quien fungía como número dos de las fuerzas estatales.

“El informe fue elaborado conforme al Protocolo de Estambul -prueba avalada por la ONU para determinar si una persona fue víctima de tortura-, y señala que Yáñez Osorio presentó lesiones acordes con las denuncias de tortura que el inculpado presentó desde que fue privado de su libertad la noche del 21 de enero del 2015 por policías ministeriales de la Procuraduría de Tlaxcala”, sostiene el medio digital.

La detención ordenada por Alicia Fragoso Sánchez, titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) fue debido a que el ex funcionario estatal estaría involucrado en cuatro casos de secuestro exprés de los cuales dos fueron desechados por jueces locales por falta de pruebas y violaciones al proceso.

La noche del 21 de enero de 2015 el ex mando policial se encontraba en otro lugar tal y como se mostró en fotografías, sin embargo, fue acusado de haber participado en un secuestro exprés en el que la movilización paralizo y asusto a los vecinos del municipio de Apetatitlán, quienes presenciaron un fuerte operativo policiaco.

“A partir de las declaraciones de la víctima ante un juez penal, las 12 consultas médicas que se le brindaron a Juan Carlos Yáñez Osornio en la clínica del penal y cuestionarios preparados por la perito Patricia Islas, el reporte del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) concluyó que los dichos de la víctima son coincidentes con las secuelas de tortura”, dicta Aristegui Noticias.

Extraoficialmente se sabe que los ex mandos policiacos fueron “chivos expiatorios” para darle al gobierno estatal una imagen de combate al crimen, mientras que otra versión señala que los policías estatales habrían descubierto nexos de la procuradora del estado con narcomenudistas.

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