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El avasallador control que tenía la senadora Adriana Dávila Fernández sobre el Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Acción Nacional (PAN) ha ido perdiendo fuerza con la sublevación de su ex mayordomo y ahora dirigente estatal albiazul, Carlos Carreón Mejía, quien nuevamente le vuelve a ganar la partida a su ex jefa y baja a su candidata a la diputación local plurinominal, Leticia Hernández Pérez.
A pesar de la negativa de la dos veces ex candidata al gobierno del estado para que Carlos Carreón regresara a la dirigencia panista, el panoteco se encuentra nuevamente despachando en Independencia número 58 y consolidándose como el nuevo dolor de cabeza de la senadora maltratada.
El golpe demoledor a la supremacía de Adriana Dávila en el PAN local, fue la remoción de Leticia Hernández Pérez del primer lugar de la lista de candidatos por la vía plurinominal al Congreso del Estado, quedando en su lugar Eleticia Barragán, quien se presume es una persona muy cercana a Carlos Carreón.
Leticia Hernández fue bajada de su aspiración debido a que no cumplió con las reglas del PAN, ya que debía haber solicitado licencia a la Secretaría de Promoción Política de la Mujer con 24 horas de antelación y no sólo con 12 como lo hizo.
La verduga de la pupila de Adriana Dávila es Beatriz Almadar, ya que fue quien realizó las observaciones al Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, aun cuando la senadora le pidió que no lo hiciera para que se quedara la lista como estaba, sin embargo, hizo caso omiso de lo recomendado por la próxima diputada federal pluri.
A la senadora se le salió de control la situación debido a que Vivian Burle fue descubierta siendo “juez y parte”, ya que mientras es parte de la Comisión Permanente fue la encargada de recibir la documentación de la Comisión de Elecciones, lo que le permitió ignorar la licencia de 24 horas que debía tener Leticia Hernández y no sólo de 12 horas.
Cuando Beatriz Almadar se percató le cayó como oro molido a Carlos Carreón, quien no dudó en llevarlo a la dirigencia nacional para bajar a la seguidora de Adriana Dávila y así poder colocar a Eleticia Barragán.
De esta manera, quien era considerado como el mayordomo de la senadora le ha ganado por partida doble, primero regresando a la dirigencia estatal luego de colocarse como candidato a diputado federal por la vía plurinominal y después por quitar a la ficha de Adriana Dávila y poner a su incondicional.