- Tlaxcala
De acuerdo con el testimonio de personal que labora en el Poder Judicial de Tlaxcala, los momentos que viven son los más complicados de los que tengan memoria derivado de la peor escasez que ha azotado al Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), gracias a la insensibilidad del presidente de este Poder, Héctor Maldonado Bonilla quién llegó a esta posición gracias al exgobernador, Mariano González Zarur.
Personal que labora en el Poder Judicial, dijo a este medio que la crisis que se vive en las oficinas de Ciudad Judicial es evidente, ya que no hay los materiales indispensables para cumplir con la encomienda de la impartición de justicia, al grado de que en los juzgados y otros espacios no hay tinta para las impresoras, lapiceros o si quiera hojas blancas.
Han sido los mismos trabajadores que ante la austeridad aplicada por Maldonado Bonilla, deben de poner de su propio bolsillo para contar con el material que les permita cumplir con su trabajo, esto a pesar de que existe un millonario presupuesto para esta necesidades de primer orden.
"No es posible que habiendo un presupuesto tan grande para las necesidades que tenemos en el Poder Judicial, existan este tipo de precariedades, nunca habíamos vivido esto y está vez el presidente se ha pasado, quiere todo para él y lo más grave es que no se cuenta con lo mínimo para operar, ahora sí se llevó los lapiceros y hasta las hojas, no tiene llenadera", dijo una persona que labora en el TSJE.
De esta manera, calificaron a Maldonado Bonilla como el peor presidente que ha tenido el TSJE empezando por ser gente del exgobernador más odiado de la historia moderna.