• Seguridad
  • Emilio Piedras
La policía estatal no hace nada para evitar esos atracos que ya son la constante. Anoche se reportaron dos hechos.

Los asaltos violentos para despojar a los propietarios de sus vehículos son la constante en la entidad, pues anoche se registraron en Apizaco y en San Pablo del Monte dos hechos sin que la policía estatal haga algo para detener a las bandas de delincuentes que operan con total impunidad.

El primer asalto se registró a las 20:30 horas de ayer, cuando la víctima circulaba por Santa Anita Huiloac, donde es interceptado cerca de una gasolinera por un automóvil que traía torretas como las que utilizan las patrullas.

Al detener su paso, es obligado por hombres armados junto con su menor hijo a subirse a otra unidad de color negro. Les piden que no griten y que si lo hacen los van a matar. Minutos más tarde las víctimas son abandonadas atrás de las fábricas de Tzompantepec.

El automóvil robado fue un KIA Forte modelo 2020 de color gris que tenía las placas de circulación   XTF431A.

El otro atraco violento se reportó en la colonia Tlaltepango de San Pablo del Monte y ocurrió anoche cuando el propietario de una unidad automotora circulaba por el Camino Real cerca de los campos deportivos, cuando cerca de las 21 horas fue interceptado por una camioneta Town Country color verde y un Aveo de color negro.

De esos vehículos descendieron cuatro sujetos armados, quienes le quitaron su unidad para darse a la fuga con rumbo a la vía corta de Puebla Santa Ana Chiautempan.

El automóvil que se robado de trata de un Volkswagen Jetta color rojo del año 2000 con placas UAA2749 del estado de Puebla.

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