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En entrevista para este medio de comunicación, el presidente municipal de Chiautempan, Antonio Mendoza Romero dio a conocer que no cuenta el Cabildo y él mismo con información por parte de la síndico municipal en relación a los detenidos por los actos vandálicos protagonizados en la ciudad sarapera hace más de una semana.
Al ser cuestionado sobre el estado que guardan los detenidos por los actos vandálicos que se presentaron en días pasados, Mendoza Romero dijo no tener información específica y que sólo a través de los medios de comunicación es como se entera, ya que hasta el momento la representante legal del municipio, Belén Vega no ha dado informes al Cabildo.
En este sentido y al reconocer las atribuciones de la sindico, confió en que hará el trabajo que le corresponde como lo es la defensa del patrimonio municipal para dar certeza a la ciudadanía de que los bienes que guarda el Ayuntamiento son defendidos en contra de actos vandálicos que generan incertidumbre.
Dentro de los daños, el alcalde señaló que fueron tres patrullas las que resultaron con averías, además de lesiones hechas a personal de seguridad pública y robos a pertenencias de los policías, por lo que espera que se sigan las acciones que correspondan para que este tipo de situaciones no queden sin ser castigadas tal y como lo marca la ley.
Es por esto que al preguntarle si en su carácter de presidente perdonaría a los agresores, comentó “Jamás perdonaría ese tipo de actos, estoy seguro que los miembros del Cabildo estan en la misma tesitura, si la síndico desea hacerlo sería por cuenta propia”, lo cual atentaría en contra de las funciones de la defensa del patrimonio municipal.
Finalmente, reiteró su confianza a que la síndico conozca la ley y actúe conforme a derecho para cumplir con lo que espera la ciudadanía de Chiautempan y no en favor de las personas que con hechos vandálicos agredieron el patrimonio municipal y pusieron en riesgo a la misma población, al mismo tiempo que se comprometió a continuar trabajando en las principales necesidades que aquejan a los habitantes del municipio sarapero.