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  • Roberto Nava Briones
Guerreros priistas no se prenden ni con la visita del líder nacional del CEN del PRI

Los priistas abarrotaron la plaza de toros de Apizaco, sin embargo el ambiente no fue de júbilo en torno a la campaña de Marco Antonio Mena Rodríguez  rumbo a la gubernatura de Tlaxcala.

El líder nacional del PRI Manlio Fabio Beltrones llegó a la cita. Ahí ya lo esperaba el gobernador Mariano González Zarur y su hijo mariano González Aguirre, abanderado a diputado local por el distrito 04.

Fue en el mensaje de Manlio Fabio donde la esperanza de triunfo se diluyó en los rostros de varios priistas, ya que por un lado Beltrones auguraba un triunfo irrefutable y en contraste hasta el nombre de Marco Mena se le olvidó, pues en su discurso hasta en tres ocasiones lo llamó “Marco Adame”, quizá en alusión a su ex compañero panista cuando ambos formaron parte de la pasada legislatura.

A pesar de que el coso taurino fue abarrotado desde las primeras horas de este sábado, los mensajes tanto de Beltrones, como de Mena no prendieron a los guerreros priistas que llegaron con trompetas, souvenirs, teponaxtles, e infinidad de accesorios con los cuales buscaban hacer ruido para prender una plaza abarrotada de gente.

Qué decir del mensaje de la hija del ex líder sindical J. Carmen Corona, quien fue la encargada de dirigir el un discurso que tuvo poco contenido.

Afuera, decenas de autobuses esperaban listos para regresar a los miles de asistentes que fueron llevados a la Plaza de toros de Apizaco.

Hasta patrullas de presidencias de comunidad fueron usadas para acarrear gente a la cita con el priismo tlaxcalteca. La plaza de toros resultó insuficiente para recibir a poco más de 10 mil asistentes.

Cabe hacer mención, que la movilización priista provocó el mismo caos en la ciudad de Apizaco que en días pasados generó un mitín de apertura de campaña de la candidata del PRD-PT a la Gubernatura Lorena Cuéllar Cisneros en el zócalo de la ciudad rielera.

En calles aledañas la basura y el desorden imperó no obstante de que el alcalde apizaquense recientemente se sumó a las filas del tricolor y dejó el PAN después de que el albiazul lo impulsó a la alcaldía por lo que aprovecho para darle una cachetada con guante blanco a su ex madrina política Adriana Dávila, quien se siente dueña de esa plaza políticamente hablando. 

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