- Salud
A menos de un mes de la llegada de la recién desempacada Lorena Flores Ordoñez a la Secretaría de Salud (SESA) como vocera, empieza a mostrar signos de incapacidad y poca apertura con los medios de comunicación, debilidad que ha comenzado a ser visible por acciones temerarias emprendidas que han iniciado el proceso del desgaste natural con sus compañeros de oficina.
La ex reportera de un medio de comunicación impreso se sabe que llegó a la titularidad de la vocería en la SESA debido a que se presume que es sobrina del director Administrativo, Joel Trinidad Ordoñez Carrera, así como del titular de la Secretaría de Gobierno, Ernesto Ordoñez Carrera.
Teniendo este antecedente y al llegar a un espacio en el que de manera natural no tenía aliados, decidió tomar como mano derecha a Mayra Flores Cervantes, quien pretendía este espacio para cumplir su sueño de estar al frente de esta área que había visto frustrado en dos ocasiones anteriores a pesar de ser hija del compadre del ex secretario de Salud, Jesús Fragoso Bernal.
Ahora la vocera ha decidido hacer de su aliada a una persona que ha sido cuestionada por sus compañeros de oficina ante la falta de capacidad y los conflictos que ha generado dentro de la SESA, quien ha sido a punto de ser despedida en tres ocasiones y sólo la amistad de su papá con el anterior secretario le salvo el puesto.
De inicio se enfrenta con esta situación Lorena Flores quien se ha visto con actitudes de favoritismo hacía algunos medios en particular con uno impreso de donde emanó, además de mostrarse lenta con la información durante el evento de la Huamantlada, en donde brilló por su ausencia y regatear los datos a representantes de los medios de comunicación.