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Enardecida se encuentra la dirigente de la sección 27 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), Blanca Águila Lima, quien al ver complicadas sus intentonas por hacerse de espacios importantes dentro de la Secretaría de Salud (SESA) busca quedarse con la dirigencia del Partido Revolucionario Institucional (PRI) esperando que el actual líder, José Luis Ramírez Conde le deje la estafeta al ostentar el cargo como titular de la Secretaría de Fomento Agropecuario (SEFOA) en el gobierno de Marco Mena Rodríguez.
Entre sus allegados existe la instrucción de descalificar al actual dirigente del PRI, así como al secretario de Salud, Alberto Jongitud Falcón, el primero para arrebatarle el partido y al segundo para que ceda a sus intereses de controlar una de las secretarías que más recursos reciben por parte de la federación.
Al no haber obtenido la titularidad de la SESA, Blanca Águila estaría presionando para que le entreguen la dirigencia del tricolor, ya que actualmente funge en la segunda posición como secretaría general del PRI, la finalidad es que Ramírez Conde renuncie al tener una cartera de primera línea en el actual gobierno.
Personal de la SESA entrevistado por este medio aseguraron que la lideresa sindical busca aglutinar más poder para sus ambiciones personales, “Blanca no se conforma con tener el sindicato y sus cuantiosos recursos y plazas a su disposición, sino que hace unos meses también le dieron la dirigencia de la FSTSE, quería la secretaría y ahora va por el PRI, está enferma de poder”.
Según sus más cercanos, la ex alcaldesa de Zacatelco no sólo arremetería en contra del titular de la SESA y del dirigente del PRI, sino que incluso en contra del gobernador por no haberla considerado para ser la titular de salud en el estado, por lo que los comentarios ya han subido de tono, incluso al grado de haberlo considerado un pelele e inexperto.